querías de mí todo lo que no tuve
y aún así
no tuviste el valor de mirarme a los ojos
y preguntar
¿qué pasa cuando esa chispa no enciende más?
salimos del barro sólo para volver a caer
caminar no es fácil
levantarse mucho menos
erguida
o acostada
mi columna vertebral se confunde
con la tierra
y detrás de ella
el montón de sombras
cien fantasmas de hueso y sal
que pensaron que intentarlo era suficiente
y que en esta piel
no me volvería a ahogar
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